A los estuvieron, a los que están y los que
estarán.
A los que llevo conmigo en cada recuerdo vivo, a
los amigos del alma, a los que veo y a los que no, a los que se bajaron en otra
estación y a los que viajamos en el mismo tren.
A los 2.0, a los sin guasap, a los del café cara
a cara, a los que atravesaron el océano y los que atravesaron mi corazón.
A los que estuvieron en la adversidad, a los que
cada noche se inventan, a los que todavía se emborrachan, a los mismos de
siempre…
¡Feliz día del amigo!