22 de septiembre de 2022

THE CRYSTAL SHIP

 

Antonio Machado trazó en un línea “Caminante no hay camino, se hace camino al andar” y aquel que recorrió años erráticos entre pensiones cuartos de hotel mirando Crónica TV sin volumen, apurando una cerveza tibia, podría entender al poeta oriundo de Sevilla.

Cuando trabajé como periodista parlamentario en el Congreso me decían: sultano reporta a mengano pero tiene "puerto" en perengano. Hoy, lejos de los pasillos del palacio, juzgo que un puerto es morada encantadora para un alma cansada de las luchas de la vida. 

Vuelvo al puerto de Mar del Plata, hace 100 años se encendía el motor de la ciudad. El movimiento de ascenso y descenso del nivel del mar continúa en marcha. Lo contrario al agua estancada. El agua del océano se agita, nos sacude, nos interpela en invierno, nos activa en verano. Por eso, cuándo nos quedamos solos, ante la quietud, ante un corazón que deja de latir, las olas se siguen allí, moviéndose. Por eso visito a los lobos marinos en su hábitat, un emblema que se mueve en oposición a los lobos solidificados de la Bristol. 

Mi madre me inclinó a regresar a la Feliz. Mientras acondicionaba mis enseres ella se tomó un buque sin boleto de regreso. Ella siempre volvía, ella siempre pegaba la vuelta. 

Tengo la esperanza que de tanto comerme con la vista el mar ella aflorará en el horizonte. “Estas en el borde del continente” me dice Camilo. Es cierto, el poeta siempre acuna una verdad.

Mi primer juguete fue un barco de papel. Un galeón que abordaba el cordón del pasaje Púan hasta disipar su travesía en el sumidero de la calle asfaltada. Me gustaría regresar embutido en la pluma de Melville al barco ballenero comandado por el capitán Ahab, atrapar a Moby Dick, sin importar la suerte que pueda correr mi pierna.



BARCOS INALCANZABLES

El barco pirata de los Playmobil fue el viaje a Disney de la primavera alfonsinista. Puerto se llamaba el boliche Chiclana y Pirovano dónde ella me miraba, yo la miraba y hasta que un día nos miramos al mismo tiempo.

A poco menos de un mes de la celebración de “Marea Puerto”, a 100 años del primer desembarcó en el Puerto de Mar del Plata, tiramos nuestras anclas para detenernos a pensar ¿Quién desembarcó primero? ¿Qué hecho fundó lo que somos?, ¿los linajes o los caídos?

Un barco encallado es un buque que no navega. Hoy, si me quitaran el aire no solo no podría respirar, si me quitan el micrófono permanecería zozobrando un nuevo feriado marcado en el almanaque. 

Vivimos en una era inalámbrica, los responsables de que tengamos Internet en casa siguen siendo más de 1.000 millones de metros de cable submarino. Sí, estamos hipercomunicados. Sin embargo, al pensar en tantos cables bajo el mar, cavilaba sobre la conversación entre tres tripulantes de la embarcación a mar abierto en la película Tiburón. Uno de los momentos más extraordinarios de la historia del cine. El peligro acechaba debajo de la barca y ellos discutían de chucherías.

La embarcación no era lo convenientemente fuerte. El personaje interpretado por Robert Shaw finalmente fue devorado por el tiburón. Esa escena custodió mis noches desde el año 1984 hasta estos días. El implacable cazador de tiburones Sam Quint acabó con el escualo que amenazaba las costas que terminó con su vida también. Sus compañeros de aventura, Martin Brody y Matt Hooper tenían una familia que los esperaba. Al navegante experimentado lo aguardaba la confusión, una cerveza tibia, el fulgor de un televisor sin volumen y un colchón sin frazadas. De esto se trata, que alguien nos espere. 

Anoche, mientras el sueño oponía resistencia repasaba pensamientos aleatorios y llegué a la conclusión que desembarcar y hundir los pies en la arena para perderme en la belleza del océano; eso es ser libre. Hace 100 años y ahora también.












ESTO PASO EN LA HORA SIN SOMBRA

 

Esto pasó en La Hora sin Sombra

 

La Colombina

https://open.spotify.com/episode/3ZkxslZycFXXuA5T5uSpGe

 

• Historias de puertos Por Noemi Lanzon & Walter Sanchez

https://open.spotify.com/episode/4cB8GKyIzVt6bWiB2PCkES

 

Silvia Sab canta

https://open.spotify.com/episode/39tUHXbGD6CwXzubB6JfXX

 

Onne Sayavedra

https://open.spotify.com/episode/3VGxjRAaPp9clgsA6dtp31

 

• Especial Jorge Luis Borges

https://open.spotify.com/episode/0NIFBtKrRbxHXpfbyJcv91

 

Sebastian del Hoyo

https://open.spotify.com/episode/3tBLIJP47PEfK9Na0Kh2t0

 

Pablo Ciambotti

https://open.spotify.com/episode/7ix6gIzNWudYab3LH72qcH

 

• @ProyectoArcanum Julio Lopez Olivia Diab

https://open.spotify.com/episode/5DhNlNyEwA3GftnwR9nmgZ

 

 


 


11 de septiembre de 2022

PALABRAS HABITUALES


"Toda mi vida aspiré a inventar un género que tuviera algo de ensayo y algo de cuento, algo de poema y algo de confesión, más o menos breve y muy libre, en tono aparentemente melancólico pero envuelto en ligero humor, recurriendo a citas de conocidos y desconocidos que existieron en la realidad o no, con un estilo perfecto pero que no se note o que incluso parezca descuidado, como redactado por alguien que lo hiciera para cumplir un requisito que no puede eludir. Borges lo definió a su manera: "Preferir las palabras habituales a las palabras asombrosas, intercalar en un relato rasgos circunstanciales, simular pequeñas incertidumbres, ya que si la realidad es precisa la memoria no lo es, narrar los hechos como si no se los entendiera del todo, recordar que las normas anteriores no son obligaciones y que el tiempo se encargará de abolirlas"

 


     Una suerte de manifiesto de Augusto Monterroso citado por Juan Forn


4 de septiembre de 2022

EL LLANERO SOLITARIO




Hace 123 años nacía un niño que al crecer se amparó en los libros de la biblioteca de su padre como su verdadero hogar, su efectivo refugio. Un chico que se destacó en la escritura ante la admiración de Guillermo, su papá y Leonor, su mamá. 

A partir de lo que leo en el timeline de facebook hay muchísima más gente que escribe que la que lee. En palabras de Alejandro Dolina, vivimos una era con más críticos de tango que bandoneonistas.

La vidriera virtual, a priori generosa, nos permite mostrar nuestros dones sin pagar peaje. Donde quebrantan los profesores con su voz firme “¡no, mira, esto no está bien”

Traigo en este pensamiento una mala noticia, no todos podemos pintar como Picasso o escribir como Borges. Aceptarlo también es una virtud. Lo vemos cada fin de semana: un estadio repleto con 60.000 personas mirando un deporte que juegan 22. No alcanza con el talento, hay que acompañarlo con trabajo y no alcanza con solo el trabajo, falta ese no sé qué, que es lo más importante.

Hoy quería poner el foco en el niño Jorge Luis Borges, en la relación con Leonor Acevedo, esa mujer que de alguna manera tuvo una vinculo simbiótico con Georgie (como ella le decía) que falleció cuando Borges tenía 76 años. La mujer que lo ayudó a escribir el final del cuento La intrusa. 

Hablando de finales, quizás no haya sido la ceguera lo que dejó aturdido a Borges sino la perdida de la mujer más importante de su vida. Basta leer el "Libro de Arena" de ese mismo año, 1975, para vislumbrar una prosa más accesible en cuentos como El otro o Ulrica.

Cuando Borges perdió a su madre sobrellevó una gran perdida y nosotros, como lectores, ganamos en la lectura de poesías que Borges escribió hasta su muerte. Poemas a corazón abierto como "El amenazado", "1964", "El enamorado", "Las causas", "Lo perdido" y "Ausencia". Georgie se mostró menos y se expuso más.

Si bien en la década del 40 Borges desplegó toda su potencia narrativa en cuentos como “El Jardín de los senderos que se bifurcan”, “El Aleph” o “Tlon, Uqbar, Orbis Tertius” hoy prefiero detenerme el Borges de la pérdida, el que se quedó en penumbras. Un oscurecer imperecedero y sin Leonor.

En definitiva, en su puesto de director en la Biblioteca Nacional por un lado o la humillación de haber sido Inspector de aves, conejos y huevos; el escritor que no ganó el premio Nobel. El que compartió un premio con Beckett y el Cervantes con un ignoto Gerardo Diego que se nutrió de las librerías de Avenida Corrientes y como un niño que se entretiene con la plastilina. 

Al final del camino nos confirió una frase como una flecha: He cometido el peor de los pecados que un hombre puede cometer. No he sido feliz.

Lejos de analizar su retórica, así como nosotros queríamos ser vaqueros, Borges quería ser un cuchillero de los arrabales porteños de fines del siglo XIX. No para lapidar a otros sino para sentirse fuerte y vigoroso. El cuchillo fue su pluma y en esa pluma encontró su estilo y su forma de ver el mundo.


CEGUERA

En el año 53 perdió la vista y devino en un conferencista de pequeños teatros, no cómo podría ser Darío Z o Gabriel Rolón. Un conferencista que recorría Pehuajó o Chivilcoy y hablaba para 10 o 15 personas sobre Chesterton, Byron o Schopenhauer.

Jorge Luis Borges nació hace 123 años y se adelantó un siglo. Adjetivó como nadie y nos engatusó como pocos. Borges nos inspiró a leer autores desconocidos y nos hizo sentir que no estábamos solos en esto de refugiarse en los libros ante la amenaza del mundo. 

Borges afincado en Buenos Aires, en la calle Maipú 994 6° B atendía el mismo el teléfono e invitaba a su casa a periodista prestigiosos y estudiantes de periodismo a quienes le daba una nota con el mismo trato, el mismo respeto.

Borges fue políticamente un conservador, un intelectual reaccionario pero poéticamente fue un revolucionario. Un niño de Buenos Aires que encontró en los libros su juguete que timó con maestría a los lectores desplegando historias apócrifas, como si tuviera accedo a google en 1940.

Borges vivió los últimos 40 años de su vida en la penumbra, en horas sin sombra y sin embargo iluminó a quienes lo leían, lo querían y lo envolvieron de ternura a través de la lectura de sus relatos.




22 de agosto de 2022

FELIZ CUMPLEAÑOS, SALMON

 

“Calamaro es como Bukowski. Uno lo lee y dice: así escribe cualquiera. Un poco de sexo, un poco de alcohol, trabajos mal pagos, frases cortas. Y lo intentás, obvio. Y te sale una mierda sin nombre”











17 de agosto de 2022

HITOS

 1

Cuándo eras más chico, mamá te venía a buscar. Debo reconocer que en términos de logística era cómodo y simplificaba nuestro traslado. Bajábamos dos pisos por escalera (¿Acaso allí aprendiste a contar hasta 24?), con tus muñecos, la mochila y tus hoyuelos.

Te ibas despaciosamente. Al regresar y subir los dos pisos me encontraba con otro lote de juguetes que habías dejado. Si digo que era mucho por ordenar, estaría exagerando. Con vos allí, una noche me ganó la ansiedad. Fue el 25 de mayo de 2010. Tenías dos años y medio. Cenamos fideos tirabuzón con manteca, un poco de aceite y jugo Tang. Tenía un pañal en la recamara. Suplicaba que esa noche no lo necesitaras.


2

En la televisión de catorce pulgadas transmitían el festejo del Bicentenario. Lo miraba con cierto recelo. Hacia dos meses había formado parte de una agrupación que me convocó como tutor de una Escuela de gobierno. 

Señores con sus morrales curtidos, progresismo sobreactuado y plazos fijos voluminosos. "Los pibes por la liberación" de manera unilateral decidieron no pagarme, luego de un trabajo a destajo por toda la provincia de Buenos Aires. —Es por incompatibilidad con tu trabajo en ciudad — me dijo alguien que aspiraba ser Ministro de Gobierno y administrar "la viva" de 135 municipios. Hoy reposa en el ostracismo. 

Terminamos de cenar y decidí lavar un plato verde de plástico de Ben 10. Quedaban unos pocos fideos, yo quería dejarlo limpio para cuando te fueras. No era porque me diera flojera hacerlo, sino porque no quería dejar nada tuyo por limpiar. Ver tus cosas me partía el alma.

Las Pelotas tocaba su hit "Será" en el escenario de la 9 de Julio. La multitud coreaba el estribillo. En ese momento, escuché: “ma itos” y te pregunté “¿caballitos?” No, no. “itos” Querías decir "más fideítos".

Saqué los fideos del tacho de basura. Enjuagué lo que había tirado. Lo calenté en una olla mientras los juegos artificiales iluminaban el obelisco, al tiempo que comías con cierta desconfianza. Me sentí digno. 

Se termino el horario de visita y te vinieron a buscar. Al subir, vi a Woody y Goofy desparramados en el piso de parquet. Me desplomé en la única silla firme y me quedé con los hombros hundidos sobrellevando el vacío de tu ausencia.

Un día el auto de mamá dejó de venir. Al tener que llevarte las visitas sufrieron un ajuste. El régimen seguía siendo el mismo y el viaje nos consumía una hora para ir y otra para volver. Nos pasábamos dos horas arriba del colectivo. Sin saberlo, amortiguaba el dolor ¿Y por qué digo amortiguaba? Porque te contaba cuentos, aprendí a disfrutar del viaje como parte de una visita pautada en un escritorio.

Con la llegada de mi primer o Km nuestra situación cambió. Tenía que manejar atento al tránsito, a los camiones en la ruta 2 cuando viajábamos a ver a la abuela a Mar del Plata. Se acabaron los cuentos. ¿Acaso realmente progresamos?

 

3

Anoche viajaste sólo a Buenos Aires por primera vez. Pasamos un fin de semana largo increíble. Vimos y vivimos juntos: Liverpool vs. Crystal Palace; Almirante Brown vs. Ferro; Chelsea vs. Nottingham Forest; Chicago vs. Morón; Racing vs. Boca. ¿El mar? Bien, gracias. Anoche, con tu bolso de mano y un folio con tu certificado de nacimiento viajaste solito con destino Dellepiane.

La gestión de anoche también simplifica pasos. Con dos boletos; uno de ida y otro de vuelta, estuvimos juntos otra vez. Al salir por Luro súbitamente, sentí frío. Me froté los tobillos y las rodillas. Golpeé las manos, (ninguna mano aplaude sola) Frente a la pared principal de la terminal, sacudí los brazos como un espantapájaros. Luché con la rapidez de mi sombra y después recité de un tirón: “Para entrar en el reino de lo cálido tenemos que aprender a salir de la frialdad”.

Sentí una estocada en medio del pecho. Quizás, viajar juntos hasta Buenos Aires amortigüe el dolor, ¿Acaso viajar es amortiguar el dolor? Antes de tu partida, subí al micro con la impunidad de los padres empalagosos que seguimos tratando a nuestros hijos como si fueran niños por siempre.

 

4

Te di un abrazo. No me importó que tuvieras vergüenza. Te di un beso y no me importó que te diera calor. Se me cayeron dos lágrimas y no me importó que me vieras emocionado. Bajé, el micro salió a horario. Le dije al chofer — es la primera vez que viaja solo — Al matrimonio que estaba al lado tuyo le dije — lo miran, viaja solo por primera vez.

Una chica muy bonita no me perdía de vista mientras despedía a su novio indiferente más pendiente de sus auriculares que de su novia. Le habré causado ternura porque cuando el micro se alejó, lloré como no lo hacía hace mucho tiempo.


5

 Cuando el micro arrancó. Te vi en el reflejo de la ventanilla y sentí un hueco en el pecho indescriptible. Sonaron Las Pelotas por el altoparlante y recordé a cientos de miles de personas en el obelisco cantando y saltando en el festejo del Bicentenario. 

Me vi con 16 años pogueando con “Shine” en las Fiestas del Condón Clu. Éramos pocos, lo sé. Ahora somos menos, sin Biain e Higuain en el fondo, me toca agarrar la cinta de capitán. Espero poner una pelota en profundidad, que salga una diagonal para que todos los goles ahora sean tuyos y ya no tengamos que levantar fideos del tacho por la incompatibilidad de distritos.







16 de agosto de 2022

¿ESTÁS EN COMPAÑÍA?

 

Anoche soñé con vos,

la ruta 88 recorrías

envuelta a tu sonrisa

y tu melena enrulada, ambarina.


Paraste en Quequén,

el narrador lo sabía, 

En el ensueño

me pregunté:


¿Por qué el guión me ignora?

¿El titiritero del inconsciente me esquiva?

¿Volviste de Neco? ¿Estás en compañía?


Ring









15 de agosto de 2022

#52 LA WHILLINGTON



Con 20 años de trayectoria y siete producciones independientes, siguen llevando adelante un proyecto colectivo musical con un mensaje comprometido.

Este martes nos visitó el querido Pablo Ciambotti cantante y fundador de @lawhillington

www.radiovinilo.com.ar

Radio Vinilo 89.1









7 de agosto de 2022

#51 PROYECTO ARCANUM

 

Proyecto Arcanum

Un programa diferente con participación de fotógrafos y fotógrafas en los estudios de Radio Vinilo 89.1

Una experiencia inmersiva disparada por la fotografía, teatro, música y artes plásticas






29 de julio de 2022

MIRALA QUE LINDA VIENE

 




Mirala que linda viene

Mirala que linda va

Es la banda de Boedo

Que al Ciclón viene a alentar.

No me importa donde juegues

Siempre te voy a seguir

Yo lo quiero a San Lorenzo

Y por él voy a morir.




28 de julio de 2022

#50 PRIMER AÑO

 

Un año al aire, un año de felicidad.

Programa especial con dos almas muy cercanas a mí corazón

¿Dónde? Radio Vinilo 89.1

¿Cómo? FM 89.1 o www.radiovinilo.com.ar

¿Cuándo? MARTES 22 HS









23 de julio de 2022

#49 | NOCHE

 


Nos visitó Paola Galano periodista y poeta. Desde 1998 trabaja en el diario La Capital de Mar del Plata. Cubre noticias del ámbito cultural y del espectáculo. Colaboró con la revista Sudestada y la revista Ajo. Fue parte de El despeje en Radio De La Azotea 88.7 Fm. Escribió dos poemarios. Nació en el barrio de Termas Huinco, en el puerto marplatense. Conversamos con Paola sobre periodismo, cultura local y otras yerbas.



16 de julio de 2022

#48 | RETORNAR AL AMOR

 


EL SUSURRO DE LAS MUJERES

Nos visitó la escritora Gabriela Exilart.

En “El susurro de las mujeres” la escritora marplatense repone la lucha por los derechos de las mujeres en Argentina a principios del siglo XX a través de la amistad de dos hermanas y Julieta Lanteri.

Amores cruzados, infidelidades, pasiones y dominación masculina.







10 de julio de 2022

RETORNAR


1 Al salir a dar una ojeada por la ventana puede florecer el amor. Es un reencuentro entre los ojos y la supremacía de la naturaleza. ¿Pero acaso los árboles, las nubes y las almohadas nos abrazarán un domingo a las 7 pm?

Lo que diferenciamos con la mirada es solo un recorte. Cuando los sentidos se conectan con el corazón, un sentimiento repentino e inusitado decide por nosotros y la razón queda a un lado. Y allí, nos acomete un soplo divino y volvemos a sentirnos vivos. A abrigar una sensación: podemos volver a empezar.

2 ¿Por qué escribimos? A veces las letras a pisar el papel son como una marca de fuego que cauterizan una dolencia. Impactan sobre la hoja en blanco y reproducen lo que las palabras reprimen. 

Vuelvo al domingo, el día esperado para descansar, de aquellas mesas largas y familias numerosas.

Hoy, la misma mesa se redujo y muto en una habitación en penumbra con el televisor encendido y una película de I sat que se repite en un scroll iluminando el rostro. La agitación de volver a empezar nos devuelve matices y nuevas pinceladas sobre un lienzo que fue gris. 


3 ¿Cuál es la manera más sincera de hacer saber lo que sentimos? Alguien me dirá, con los hechos. Pero no es tiempo de teorías ni de credos, es tiempo de amar con el corazón en la mano.

Las ideas que buscan acomodarse para darle formato a un programa de radio, conspiran con el hecho lúdico de exponer sin filtro. Y allí, donde las creencias y los prejuicios se desmantelan, reaparece un decir que poco sabe de discursos. Que se manifiesta en una mirada, en un roce, en un jugueteo, en un aire familiar que nos reubica en la mesa donde fuimos felices. Cuando no se pueden decir las cosas, las miradas se cargan de palabras.


4 Es difícil escribir sin bocetos, que el texto sea tal cual salió a la luz. Pero más difícil es bajar la guardia y entregarse al deseo más profundo de dejarse llevar por el primer impulso.

¡No seas impulsivo! nos grita el capitalismo al mismo tiempo salimos a comprar sin pensar en intereses ni usuras.

¡No seas impulsivo! nos dicen nuestros padres cuando llegamos a casa con un moretón en el ojo después de una paliza.

¡No seas impulsivo! nos expone nuestro analista ante cada desamor. Pero el corazón, que siempre renueva sus pujanzas, nos invita a salir al ruedo porque allí es donde habita su razón de ser.


5 Un corazón con curitas sabe de desencuentros, pero no es rencoroso. El rencor es primo hermano del desamor. Y en cuestiones de amor, la relación filial siempre flaquea.

Miguel Unamuno decía que un libro debería despertar en el lector el deseo. ¿Será que una novela nos eleva aún más a la llamada realidad? Sin una dosis de ficción, la vida se vuelve muy hostil.

6 ¿Cuál es el momento conveniente para el amor, para el deseo, para la pasión? Creo que en la pregunta está la respuesta. Es ahora. En el amor no existe el libre albedrío, nadie puede decidir de quién va a enamorarse. El campo fértil se vigoriza con las lluvias, ¿el momento de entregarse al amor llega después de las lágrimas? Ya no es tiempo de lamentos. Es tiempo de acción. De actuar para poner en movimiento las emociones y dejarnos llevar.

7  ¿Qué significa dejarse llevar? Es soltar los miedos, es pensarse de a dos. Es entender que la habitación en penumbras se enciende con un aroma renovado, una música con acordes de esperanza.

Y el roce de las sábanas en soledad trasmuta en caricias que entibian la piel con el calor de una presencia real. Volver a asomarse a una ventana sin rejas, sin telenovelas de la tarde y los ojos que al salir al mundo insisten que todo susurro es un mimo, que todo encuentro es un reencuentro.

 



7 de julio de 2022

LHSS | ME GUSTARIA | CAP 47

 

REGGAE WITHOUT SHADOW

PANAL nació en diciembre de 2006. De aquellos viernes en el primer piso de La Mula Plateada a compartir su música en diversos escenarios con bandas locales y artistas nacionales como Nonpalidece, Dancing Mood, Israel Vibration, Alpha Blondie, Natty Combo, La Delio Valdez, Mala Fama, Kapanga.

Luego de 16 años en el ruedo visitó La Hora sin Sombra Luciana Messina (voz) y Pablo Depaoli (teclados) reggae 100% marplatense.









5 de julio de 2022

ME GUSTARÍA

 

 

Hola soy Raulito, Raulito de 9 años. Es un trabajo para el colegio. Me pidieron que le escriba al hombre que seré cuando cumpla 45 años. No escribo nunca, me da vergüenza y mi letra la entiendo yo y mi mamá. Nadie más.

Bueno, no sé cómo empezar. ¿Cómo será la escuela, el pizarrón y las seños? ¿Habrá recreos de una hora? ¿Te imaginas? Capaz seas un cyborg con ojos computarizados que lee todo rápido, memoriza sin estudiar y salva al mundo de una invasión extraterrestre, ¿te imaginas? Ya puse “te imaginas” dos veces.

 

Me gustaría tener algo de robot para no ponerme triste cuando mi papá mira a San Lorenzo y se enoja con la tele. Me gustaría ser un robot para cargar en un brazo mucha coca como cargan nafta los autos y una pajita larga para tomar todas las veces que quiera.

Me gustaría tener muchos australes y comprar coca chiquita de vidrio y porciones de pizza.

¿Tenes una casa? ¿Tenes un perrito? No sé si serás un papá, porque a mí me gusta jugar mucho y los papás no juegan mucho.

Con 45 años capaz tengas bigotes, y los señores de bigote no juegan. ¿Alfonsín jugará a la bolita?

 

Cuando voy a la casa del Erni pregunto: ¿Juega el Erny? ¿Y vos? ¿Cómo preguntas a tus amigos si juegan?

Me parece aburrido el juego de juntarse, tomar vino y al rato ya no son como antes de tomar. Se ponen raros y se ríen de unos chistes que no entiendo.

 

¿Trabajas? ¿De qué?

Un trabajo es algo aburrido. Capaz que cuando cumpla 45 hayan inventado una máquina que tenga un botón para volver a tener 9. Está bueno el 9, como la camiseta de Perazzo.

¿Voy a jugar a la pelota? Estaría bueno.

Yo no quiero dejar de correr. Los muñecos de la guerra de las galaxias y los de He-man los quiero tener siempre. No me gusta este trabajo de la escuela porque no quiero perder a Man-At-Arms, no quiero que mi mamá sea una abuelita.

No la imagino tejiendo en una silla tomando la leche con flautitas.


 

Dibujo que guarda mi papá en la carterita 

Lo único que quiero es tener 25 para manejar una nave como Donovan. No quiero tener otra novia que no sea Andrea Ducrey, no quiero que tiren mis juguetes. ¿A quién le podes avisar?

Quiero dibujar todo el día. La abuela Gregoria puede cocinar algo rico y yo dibujar lo que ella me pida. Para ella soy el mejor dibujante de todo el colegio.

No quiero ser pelado. Los pelados son todos iguales y yo no quiero ser igual a nadie.

 

6

Ya nadie me dirá Raulito. Mi papá se llama Raúl también y tiene 39. En el barrio le dicen Don Raúl. Mi papá es Don. Es lindo ser Don porque los nenes te preguntan cosas y esperan la respuesta o australes para comprar golosinas. Si sos Don podes golpear la puerta de la casa de Doña Marta para buscar las pelotas que hay en su patio.

 

7

Cuando tenga 45 mi mamá tendrá 71 y mi papá 75. A mi mamá la imagino con 100.

Yo no me voy a casar, voy a escribirle cartas a Andrea cuando tenga linda letra y así seremos novios. No me animo a besar. Luisito me dijo que el besó, pero antes masticó dos bazzocas de frutilla. Voy a cuidar a mi mamá. Le voy a cortar las milanesas chiquitas para que las pueda masticar.

 

8

No me gustaría que seas malo, triste y egoísta. No me gustaría que seas de Control o hincha de Iván Drago o policía o fan de Menudo. No me gustaría que mires películas aburridas.

No me gustaría que dejes de dibujar y jugar a la escondida. Me gustaría que te escondas igual. Aunque no cuente nadie. Que te rías siempre y tomes Nesquik. Que hagas globos con el chicle. Que sigas escondido hasta que salgan a buscarte los pibes de la cuadra. No quiero ser grande. No me gustan los grandes. Nunca se ríen.

 

9

Le tengo miedo a la noche. ¿Cuándo tenga 45 podré dormir sin la luz prendida?

Me gustaría tener algún superpoder. Ser del equipo del palacio de la justicia. ¿Podré entrar? No quiero que sepan que tengo miedo a la oscuridad. Me gustaría tener rayos laser en los ojos para alumbrar la pieza y ver detrás de las paredes, como la canción.


10

Me gustaría que no tengas más vergüenza. Me gustaría que le ganemos siempre a Yupanqui en cancha de ellos. Me gustaría hablar en inglés. I would like you to have no more shame. I would like us to always beat Yupanqui on their court. I would like to speak in English. Que le pueda decir a Andrea que tiene los ojos más lindos del colegio. En el viaje de egresado de séptimo me gustaría darle un beso. Me gustaría que seas muy fuerte. Que levantes el brazo con el poder de Grayskull.

Me gustaría que seas como mi papá…