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16 de diciembre de 2017

MANUAL DE PERDEDORES 16-12-17


FM 107.1 


Abrimos el penúltimo programa de este ciclo con un relato sobre Mar del Plata, el hombre araña y el trencito de la Plaza Colón. En Literatura de todas formas hablamos de «Un Renault 12 de otro planeta» de Sánchez Mariano. Una hábil y fresca nouvelle, una habitación de doble entrada, a la cual se puede ingresar tanto por el absurdo como por el costumbrismo de un pequeño pueblo del interior. Nos visitó la poeta, profesora y licenciada en Letras Cecilia Maugeri. Nos contó sobre su taller de escritura, técnicas y de sus libros “Malapalabra” “El Visitante/The visitor”, “Caballos” además de la antología publicada por Textos Intrusos «La máscaras de la crueldad» coordinada por Cecilia que se presentará hoy en Tano Cabrón - Teatro & Bar. En un programa colmado de automóviles sellamos con el recuerdo de Chuck Berry a propósito de los fierros y el rock and roll con “Jaguar and Thunderbird”



PODES ESCUCHAR EL CAPITULO 62


3 de octubre de 2015

HAIL! HAIL! ROCK 'N' ROLL






Acá puedo escuchar la música que me gusta. En casa es imposible. Los chicos, los llantos, el perro que ladra por cualquier gilada... Ufff. Al fin una canción como la gente. Pegó el totin.
School Days. RQP. Buena radio, es nueva creo. No sé de qué grupo será. ¿Cuánto dura este semáforo? Pasa una música espectacular. El musicalizador tiene los mismos discos que yo. Ja. ¿Cuándo fue que enganché la versi.. Que canta Bart a dúo con Homero? El martes. Me sorprendo con una y me quedo todo el día tarareando como un pelotudo. Up in the morning and la la la. Los Simpsons. Los noventas. ¿Te acordás? ¡Chuck Berry en Obras!
¿Cómo veinticinco, hora pico de qué? ¡Dejáte de joder! ¡Un pico te voy a dar yo, morocha! Autopistas de Buenos Aires S.A. Ingresos Bru... Ni me recuerdo cómo aterricé, pero sé que estuve ahí. Al menos es lo que dicen los pibes que no volcaron esa noche. Escalada: 100 metros ¡Y sí! A los 17 años, mambeado, iba a donde me llevaban. A esa altura, ya había tenía junado a Berry por los Beatles, los Stones. Jagger... Richards... Grababan covers. ¡Sí! después pelaron pero… ¡Qué ladris! ¡Qué cabeza que era! No escuchaba otra cosa, fanático, mal. ¿Por dónde quiere pasar? ¿Quién es, Meteoro? "Meteoro, el hombre enmascarado es tu hermano" Reporte de la temperatura. Pintó el frío. Qué grado de locura... locura y absurda disciplina rolistón que reportaba… vaya a saber a quién carajo reportaba. Riachuelo o Río de la Plata. ¿Riachuelo o Río de ...? ¿Dónde doblo? ¡Acá, claro, qué boludo!
Ja. Pegué un disco de los Livin Colour por haber teloneado a los Rolling. ¿Los Rolling? Los Rolling dicen los chetos. Nunca escuché entero el disco. "Son buenos músicos, bla, bla, bla"... Rap, house, hip hop... Una mierda. ¡Uh! El cassette de los Stone Temple Pilots. Ja. No sabía quién carajo eran. Lo grabé igual ¡Qué cabezón! ¿Cuándo fue? ¿En 2013? Ahí, sí, en 2013, ahí sí fuimos con Benitez al Luna. 20 años después, ¿20 años? ¡Qué viejo que estoy!
¡Dale loco, mové, mínima 60! ¿No sabés leer? ¡Qué lindo recuerdo!, el viejo nos pegó un bife de realidad. Correte vos, ¿qué hacés luces?... Aguja en 120, bien ahí. Las agujas del reloj también viran para los rockers. Pegó el totin. Esperamos los riff, el groove, su pasito... Nos fuimos con la cabeza gacha. ¡Qué bajón! ¿Y qué querés? ¡87 pirulos! El pasito no llegó, sí, sí, lo tiró al final, al final del show. Y bueno, qué va a hacer. ¡Una Shell!, ¡por fin! Dale gordo, mové. ¿Cuánto vas a cargar? ¡No podés escuchar Arjona, papá! Listo, último tirón. Nada, nada como el viejo Chuck en la autopista.
Un día voy contar “el abuelo vio a Chuck Berry en vivo... en vivo, ¿entienden? y tiene... y tiene en sus oídos grabado el sonido de la Gibson acoplando... en el Luna Park”. "Andá a cagar viejo choto" dirán por dentro. “El abuelo otra vez contando la misma anécdota” Es así. Qué sé yo. El paso del pato dio lugar al paso del tiempo... El tipo no puede vivir para siempre… Pero sí su música. Lo único que importa. Ahí va, con tres gambas de infinia llegamos bien a Lobos.











15 de mayo de 2014

OH, CAROL







Hace unos días sintonicé Carol en Fm rqp en la versión original. Manejar y escuchar música sigue siendo una aventura de placer para mí. Me gusta que me sorprenda una canción en la radio. La canción del viejo Chuck me llevó inmediatamente a los noventa, a una noche en especial: La noche que Chuck Berry tocó en Obras Sanitarias. 
No recuerdo como aterricé a ese recital, pero sé que estuve ahí. Al menos es lo que dicen los testimonios de quienes no volcaron aquella noche. A los diecisiete años, recién llegado del viaje de egresados, mambeado y con el hígado a la miseria iba a donde me llevaban. 
A esa altura de la soiree, ya había escuchado gran parte de la discografía de Berry a través de las versiones de los Beatles y los Stones grabadas en sus primeros simples. Formé parte de un público que sólo escuchaba a rock, intolerante, fanático e irracional. Era capaz de ir a ver a cualquier banda o solista que haya tenido alguna influencia en los chicos malos de Dartford. Dos anécdotas cómo para ilustrar el grado absurda disciplina que reportaba ¡¿vaya a saber a quién?!:
A los quince compré un disco de los Livin Colour al leer una nota en Sí! de Clarín. Los tipos habían sido confirmados como teloneros de los Stones en su gira Steel Wheels/Urban Jungle Tour. Nunca escuché el disco entero del cuarteto, una sola canción. Otra vuelta grabé dos cassettes de los Stone Temple Pilots llevado por el nombre de la banda. ¡Qué cabeza! En realidad no sabía quién carajo eran.
En fin, luego de mi fallida experiencia en Obras y aquella postura kamizake de rocker-taliban, en abril de 2013 fuimos con compañero de ruta, Victor Benitez, a saldar mi deuda. Justo veinte años después. Esa noche de otoño, el músico que inspiró a Keith Richards a tocar la guitarra nos reveló que las agujas del reloj también viran para los rockers. 
A veces las emociones nos juegan una mala pasada. Muchos de nosotros esperamos sus riffs, su paso característico y nos fuimos con la cabeza agachas. El pasito no llegó, sólo turbadamente cuando se dirigió a las escaleras al final del show. Sin embargo, tengo la seguridad que quedará impregnado en mis oídos el sonido de la Gibson acoplando en la velada del Luna Park. 
El paso del pato dio lugar, como la vida misma, al paso del tiempo de manera inquebrantable. Chuck físicamente no puede permanecer vital por siempre pero sí su música y eso, eso es lo importante.